CRISTO ANTES
Y
DESPUÉS DE SU ENCARNACIÓN
por Pierre Bittar
Junio de 2013
Durante su encarnación, Jesucristo fue llamado "Señor" por sus discípulos y por los que creían en Él. También fue nombrado Dios por su apóstol Tomás, tal como aparece en Juan 20:28, Entonces Tomás respondió y le dijo: "¡Señor mío y Dios mío!".
Cuando Juan escribió su Evangelio, llamó a Jesús "el Verbo", que también significa Dios. Esto está escrito en Juan 1:1, "En el principio era el Verbo, el Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios".
El mismo Jesús dijo que Él era Dios. Cuando fue tentado por el diablo, le dijo al diablo en Mateo 4:7, "No tentarás al Señor tu Dios." Jesús siempre ha dicho que Él y el Padre son uno, Juan 10:30, "El Padre y yo uno somos."
700 años antes de que Jesús encarnara, el profeta Isaías le llamó Dios. Véase Isaías 9:6, "Porque un niño nos ha nacido... Se llamará su nombre Admirable consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz."
A partir de lo anterior, tenemos toda la evidencia de que Jesucristo era el Dios encarnado. Pero, ¿qué era Él antes de su encarnación? El texto a continuación nos lo aclarará.
Dios es invisible y se reveló a sus ángeles en el cielo y a nosotros en la tierra por medio de nuestro Señor Jesucristo. Los versículos siguientes confirman lo anterior:
Dios es invisible:
Éxodo 33:20 El Señor dijo a Moisés: "pero no podrás ver mi rostro —añadió—, porque ningún hombre podrá verme y seguir viviendo."
Juan 1:18 A Dios nadie lo ha visto jamás. El unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.
Dios se reveló a nosotros en la tierra por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Isaías 40:1,3,5 "¡Consolad, consolad a mi pueblo!", dice vuestro Dios. Voz que clama en el desierto: "¡Preparad un camino a Jehová; nivelad una calzada en la estepa a nuestro Dios! Entonces se manifestará la gloria de Jehová y toda carne juntamente la verá, porque la boca de Jehová ha hablado."
Colosenses 1:15 Cristo es la imagen del Dios invisible...
Juan 14:7 "Si me conocierais, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora lo conocéis y lo habéis visto."
Dios se reveló a sus ángeles en el cielo, también a través de Cristo.
En la lista anterior, en Juan 1:18, cuando Jesús dijo: "A Dios nadie lo ha visto jamás", Él quiso decir que ni los humanos ni los ángeles le han visto, de lo contrario hubiera dicho, "ningún hombre ha visto a Dios". Cristo, que está en el seno de Dios revela al Dios invisible a todas las criaturas del cielo y de la tierra, los ángeles y los humanos. Esto es confirmado por Mateo 28:18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: "Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra."
Debido a que Dios es invisible y Jesucristo es su única revelación, y también porque Jesús tiene toda autoridad en el cielo y en la tierra, podemos concluir que todas las apariciones de Dios en forma humana que se mencionan en el Antiguo Testamento fueron realizadas por el Cristo preencarnado.
Cuando analizamos los versículos del Antiguo Testamento, nos damos cuenta de que Dios se ha dado a conocer a su pueblo en tres formas diferentes.
1) Solo su voz. Lo que significa que fue oído pero no visto, así como se indica en los siguientes versos:
Génesis 3:9 Pero Jehová Dios llamó al hombre, y le preguntó: "¿Dónde estás?"
Génesis 4:9 Entonces Jehová preguntó a Caín: "¿Dónde está Abel, tu hermano?"
Génesis 8:15 Entonces dijo Dios a Noé:...
2) Él aparece pero en una forma extraña como el fuego, el humo o nubes. Estos son algunos versos:
Isaías 19:01 He aquí que Jehová monta sobre una ligera nube.
Ezequiel 8:2 Miré, y vi una figura con aspecto de hombre; desde sus caderas para abajo, fuego, y desde sus caderas para arriba parecía resplandor; el aspecto era como de bronce refulgente.
Salmos 18:8 Humo subió de su nariz y de su boca fuego consumidor.
3) Cuando Él aparece en forma humana y conversa con su pueblo, no puede ser el Dios invisible. Él debe ser el Cristo que vino del seno de Dios para revelarlo. En los siguientes versos de la "palabra de Dios (Cristo)" se le apareció a Abraham:
Génesis 15:4,5 Luego vino a él palabra de Jehová, diciendo: No te heredará éste, sino un hijo tuyo será el que te herede. Entonces lo llevó fuera, y le dijo: "Mira ahora los cielos y cuenta las estrellas, si es que las puedes contar." Y añadió: "Así será tu descendencia."
En los siguientes versículos, el "Ángel de Dios (Cristo)" se le apareció a Agar:
Génesis 16:7,8,13 La halló el Ángel de Jehová junto a una fuente de agua en el desierto, junto a la fuente que está en el camino de Shur. Y le dijo: "Agar, sierva de Sarai, ¿de dónde vienes y a dónde vas?" Ella respondió: Huyo de delante de Sarai, mi señora. Entonces dijo Agar a Jehová, que hablaba con ella: "Tú eres Dios que ve"; porque dijo: "¿Acaso no he visto aquí al que me ve?"
En los versículos anteriores, el "ángel del Señor" era Cristo, porque Agar le llamó Dios. Por lo tanto, Él no puede ser un ángel creado.
Para concluir, podemos decir con certeza que Cristo fue y es desde la eternidad el Dios visible en el cielo. Él se encarnó y se hizo hombre y habitó entre nosotros. Él fue y siempre será la revelación del Dios invisible. Del mismo modo, el Espíritu Santo es la revelación de Dios en el Espíritu, Él está siempre con nosotros para guiar, inspirar y ayudarnos a comprender el Verbo de Dios. Todo esto se puede resumir en el siguiente verso:
1 Juan 5:7 "Tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el Espíritu Santo; y estos tres son uno."
EPÍLOGO
Muchas expresiones del pasado aún están en la Biblia. Cuando se las lee hoy en día, tienen un significado diferente, que también podría ser engañoso. Por ejemplo, la expresión "mano derecha" se usa para indicar "poder". Seleccionemos algunos versículos de la Biblia donde se aplicaba la expresión "mano derecha" o “diestra” y reemplacémosla por "poder". El resultado será muy convincente.
Éxodo 15:6 "...Tu diestra, Jehová, ha aplastado al enemigo."
Job 40:14 "Entonces yo también declararé que tu diestra puede salvarte."
Salmo 78:54 "Los trajo después a las fronteras de su tierra santa, a este monte que ganó con su mano derecha."
Isaías 63:12 "el que los guió por la diestra de Moisés con el brazo de su gloria, el que dividió las aguas delante de ellos, haciéndose así un nombre eterno?"
Hechos 5:31: "A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados."
1 Pedro 3:22 "quien habiendo subido al cielo está a la diestra de Dios; y a él están sujetos ángeles, autoridades y poderes."
Si interpretamos literalmente lo que Pedro escribió en el versículo anterior, vamos a pensar que Jesús está físicamente sentado o de pie a la diestra de Dios, y esto no tiene sentido. Primero, Dios es invisible [véase arriba Éxodo 33:20 y Juan 1:18] así que el estar físicamente a su izquierda o derecha no hace ninguna diferencia. En segundo lugar, Jesús ya ha recibido "toda autoridad en el cielo" [véase Mateo 28:18 en la lista anterior]. Por lo tanto, el verso de Pedro tendrá mucho más sentido cuando se interpreta de la siguiente manera: Quién ha subido al cielo está en el "poder" de Dios.
Al igual que cualquier ser humano, cuando nace un varón, este se convierte automáticamente en un hijo y tiene un padre. Cuando Jesús se encarnó en la carne, se convirtió en Hijo y, como sabemos, al ser engendrado del seno de Dios, vino a ser el Hijo de Dios y Dios fue Dios el padre. Este fue el caso durante su encarnación y se repite con razón muchas veces en el Nuevo Testamento. Pero Él no era el Hijo de Dios antes de su encarnación. Esto se puede probar fácilmente porque, en todo el Antiguo Testamento, no existe un solo momento en que se menciona "el Hijo de Dios". Por otra parte, el nombre de "Dios Padre" fue justificado apropiadamente en el Nuevo Testamento, pero este tampoco existe en el Antiguo Testamento. Y finalmente, después de la ascensión de Cristo al cielo, Él es la única revelación de Dios invisible y Él es el único Dios conocido en el Cielo. |